La precariedad laboral entre los jóvenes investigadores se ha convertido en la norma.
El caso del biólogo español contratado en Princeton tras años de negativas en España es uno de los muchos casos que se dan en la ciencia española.
La reducción de los presupuestos de I+D durante el gobierno del PP ha provocado que muchos de los que se han marchado a formarse no vuelvan o abandonen la investigación.
«El sistema español no tiene lugar para mí», cuenta el físico Iván Agulló. Un año después de emigrar le dieron un prestigioso premio que han recibido Hawking o el Nobel George Smoot.
Dejar una contestacion